viernes, 24 de agosto de 2012

Capítulo 3



Apareció el compás y me dijo: "¿Ya te fijaste en la distancia entre los vértices y el origen?" y, poniendo una de sus patas en el origen, fue brincando con su otra pata a cada vértice.

Yo lo veía, desde el papel en que estoy cautivo, no me quedaba claro qué me estaba diciendo, pero noté que su apertura no cambiaba.

Llegó la razón áurea con el número 1 y su primo el 2, el 4 y el 0 se les unieron corriendo y se pusieron a jugar a las "Estatuas de Marfil". Se metieron dentro de la casita de la raíz cuadrada y empezaron a llamar a algunos amigos que resultaron ser hijos de la señora aritmética. Sumas, potencias, divisiones y de pronto surgió una imagen que no podía yo ver claramente.

sqrt( 1 + 1/phi⁴ + phi⁴ )

sqrt( 0² + 0² + 2² + 2²)

sqrt( sqrt(5)⁴ + phi⁴ + 1/phi⁴ )

"¿Quién invitó al 5?" --pregunté. La razón áurea se empezó a reír y me dijo: "¿De veras no sabes?".

Pero cada vez que veía yo a esas imagenes, llegaba el 8 y me tapaba los ojos. "Adivina quién soy", me decía desde atrás de mí. Llegó una regla, regañó al 8 y le dijo que dejara de jugar conmigo. Le dije a la regla que no lo regañara, que no había hecho nada malo. Pero la regla me dijo: "Abre los ojos".

Me asomé a la otra parte de la realidad y vi que la regla medía la apertura del compás, cuando vi cuanto medía, la raíz cuadrada le dijo al 8 que se ocultara y claramente vi la medida: sqrt(8).

Llegó una pelota, el sol en las alturas proyectaba su sombra y la sombra siempre era una esfera tridimensional, sin importar que la esfera girara. La esfera se comió a los vértices y aunque ellos trataron de escapar, se quedaron tratando de salir de ella. La esfera empezó a reír "jer-jer-jer-Jerjes"

Uno de los vértices, Leónidas, les dijo: "¡No se rindan, somos espartanos!". Los vértices hicieron una formación y todos quisieron salir de la esfera que se los había tragado, se veían como puntitos en la superficie, igualmente espaciados.

Llegó la raíz cuadrada y el 8, desde adentro de la raíz les dijo: Ustedes no son los 300, son los 600 y todos miden lo mismo.

"Papi, papi, dice mami que si vamos a ir a la casa de la abuelita"

El vértice Leónidas me vio a los ojos y me dijo: "Aquí estamos, los 600, esto no es una esfera, es una hiperesfera. Fíjate en las sombras, ahí puedes ver quiénes formamos las celdas. Algunos de nosotros formamos celdas, pero no todos formamos celdas; las celdas tienen caras, pero no todos formamos caras; las caras tienen aristas y de dos en dos formamos aristas, pero no todos. Tú lo sabes."

Leónidas siguió peleando y antes de despedirse dijo: "Fíjate en la formación, la distancia mínima entre dos de nosotros es la medida de las aristas... haz un programa y determina las aristas". Sacó su espada y volvió a luchar con la esfera.

"Papi, papi, dice mami que si vamos a ir a la casa de la abuelita"

Oí un tigre que gruñía. ¡Cómo les tengo miedo a los tigres! Si no despierto, este tigre me va a comer, pero si despierto tendré que hacerme el dormido para que no me coma...

System is coming down...
Killing 4D daemon.

Abrí los ojos y vi a Tut, traía a su pequeño tigre, NachoYerba. De vuelta a mi celda. Soy un objeto 4-dimensional, una de mis celdas es mi cuerpo.

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